WALTER BENJAMIN
"Los vencedores escriben la historia
sin nombres de los vencidos"
Invito a toda persona de buena y mala voluntad
a saborear este panqueque
para ejemplo dulce de la verdad de BENJAMIN
este amargo relato:
"El 25 de mayo de 1810 los patriotas argentinos sellan su independencia y fue historia
el 25 de mayo de 1810 a tres cuadras de esta firma un negro moría azotado públicamente
en presencia de sus siete hijos.
Delito; robar pan para sus hijos.
Castigo; 40 azotes, muere en el azote número 18 y no fue historia"
Son estas ruinas que el carro de la victoria no recoge
por miedo a manchar las ruedas con su delito
BENJAMIN va detrás como un reportero
abriendo la chaqueta del bulto caído
buscando sus documentos
su corazón vivo
y aportarle el soplo de la redención
a la manera de un dios semita "usted cómo se llama y que hizo en la tierra"
La verdad de BENJAMIN es la herida debajo de la venda
y es el ojo de una estética el microscopio que más confía
para ver en la oscuridad
sombras
sin presencia de ninguna luciérnaga
La tecnología de BENJAMIN
no es un celular
es una célula
que camina hacia atrás cuando quiere ir hacia adelante
y es su connotado invento
una brújula que marca el sur donde estaba el norte
un texto de vida que comienza con epílogo y no con prólogo
BENJAMIN
propone volver al origen
a ese útero partero de los nacimientos
que originó el desgarro del hombre
volver
a esa lengua total que emergía del sentimiento puro de las cosas
a ese momento previo al BIG-BAN
del suceso del hombre.
Su filosofía se afina siguiendo el hilo del aroma artístico
y llega al hueso enterrado como un perro
a señalar el cadáver exquisito de los poetas malditos
con su moderna nariz respiratoria
y entra en la noche bohemia de Baudaler
y conversa con su dandy
con su splean
con su hastío que mece la cuna
de todos los sin DIOS
aplastados por la ley de la injusticia.
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